6/11/2021
Hace dos años Kilian Gerona afrontaba su mayor reto como corredor de montaña, la Gran Vuelta Valle del Genal 2019. No consiguió terminarla por extravios, problemas digestivos y enfriamientos. Le faltó poco, apenas 15 kilómetros para llega a Benarrabá, pero no pudo más.
Este fin de semana, dos años después, ha vuelto a intentarlo. Iba mejor preparado y entrenado, más experto. La carrera este año salía de Jubrique a las 6:00 de la mañana, con el ambiente y los nervios de siempre. Con buen ritmo su puesto en carrera iba del 80º al 106º, mejorando en la segunda parte hasta pasar por Algatocín con una remontada espectacular de 33 puestos. Luego debía pasar por Benarrabá.
A la altura del kilómetro 100 , la falta de balizas le hizo salirse de la ruta. Era noche cerrada y en solitario siguió corriendo por el bosque durante una hora sin recuperar el recorrido. A punto de llamar a emergencias de la organización, siguió una valla hasta llegar a una pista, pero las bajas temperaturas ya le mermaban las fuerzas y a duras penas llegó a Gaucín, ultimo pueblo antes de meta, con mas de 100 kilometros a las espaldas, donde abandonó.
Cualquier otro se olvidaría de esta prueba y diría "nunca más". Kilian el año que viene perseguirá otra vez a su Ballena Blanca. Entre los montañeros abundan los capitanes Ahab, salvando las distancias y sin llegar a la obsesión del personaje de Melville. O tal vez sí, pensarán algunos.
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