31/01/2016
Por Eduardo Cachinero
La jornada comenzaba como cualquier otro domingo pero esta vez bien temprano, ni mas ni menos que a las 6:30 de la mañana, hora a la que nos citamos Noel Oviedo, Cesar Diaz y un servidor junto a otros corredores que se disponían a completar la tradicional prueba sevillana. En total 6 corredores.
De camino a la capital andaluza y haciendo caso a nuestros vacíos estómagos encontramos una venta donde parar en las afueras de Marchena. No quería pasar por alto este punto de la jornada ya que en esta venta nos deleitaron con un suculento desayuno totalmente desconocido para nosotros hasta la fecha: el mollete marchenero! un mollete que roza la textura del bizcocho y tan caliente que el queso se funde en su interior. Os lo recomiendo.
La llegada a la ciudad fue caótica. Menos mal que quedamos bien temprano porque como ya nos advirtieron, la mayoría de accesos a la zona de salida de carrera estaban cortados, lo que provocó que tuviésemos que andar dando vueltas durante casi 45 minutos hasta lograr aparcar a casi dos km de la salida.
Después de la dura prueba de encontrar aparcamiento bajamos todos del coche con las piernas casi agarrotadas, llenos de nervios e impacientes por estar en el cajón de salida con la mano preparada para pulsar el crono. La temperatura era buena, algo de aire, pero casi inapreciable en ese momento.
Esta carrera suele ser el anticipo perfecto para el maratón del próximo 21 de febrero, donde muchos de nuestros valientes compañeros del club se lanzarán a la épica aventura de los 42km, lo cual justifica la elevada cifra de participantes.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce, y es que desde la previa de esta tradicional prueba hubo críticas por parte de un nutrido grupo de atletas a través de redes sociales que consideraron la bolsa del corredor "demasiado pobre”a pesar del precio de 18€ y sus potentes patrocinadores . Doy buena fé de ello al tener en cuenta que las camisetas que entregaron fueron en su mayoría de la talla S y con un parche tapando la fecha de la edición 2015. Demasiado cure ¿no?. Es más, algunos propusieron en las redes sociales el lanzamiento de las camisetas al inicio de la carrera como señal de protesta.
Y no sólo eso, desde el minuto uno entendímos que se trataba de un recorrido rápido. Pero una vez inmersos en la prueba, nos encotramos con un itinerario, que al adentrarse por las calles del centro, los desniveles, cambios de dirección constantes y embotellamientos continuos ralentizaban el ritmo y obligaban a esquivar a otros corredores, resultó atractivo paisajisticamente hablando pero un infierno para aquellos que como nosotros, buscaban encontrar su mejor marca en esta prueba.
Al final el esfuerzo traducido en tiempos fue de 1:32’ de Cesar Diaz que como siempre, parece que los km no le pesan y que tuvo el gesto de parar su crono y volverse en el km 19 para entrar juntos por meta (sé que de ir por su cuenta hubiese bajado de 1:30’ ) , 1:53’ de Noel Oviedo que tuvo una de sus peores experiencias en carrera debido a unas molestas rozaduras que le obligaron a detenerse en uno de los puestos de primeros auxilios hacia el km 17 y que le impidieron alcanzar su objetivo de 1:35 y 1:37’ de un servidor que se quedó con todas las ganas de bajar marca personal posiblemente debido a los factores anteriormente citados y la carga de horas de trabajo del día anterior, por buscar excusas. Así que en otra ocasión será pero NO en Sevilla miarma!!!!
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