4/7/2015
PorVictor Ayala
Una subida al cielo o
una bajada a los infiernos.
Sábado 4 de julio, 39ºC
o 37ºC a la sombra, si es que la encuentras. Nos encontramos
alojados en lo que podría denominarse un oasis en mitad del Desierto
de Tabernas, Almería. Mañana ascenderemos hasta los 2160m a la
zona del Observatorio del Calar Alto, perteneciente a la Sierra de
los Filabres de Almería, punto de salida y meta de la que publicitan
como la Media Maratón de Montaña a mayor altitud de España.
A esa altura y en
condiciones normales la temperatura debería rondar los 18-20º, pero
a las 9.30h ya se despachan 27º fruto de la ola de calor que afecta
a la zona. Toca pertrecharse de gorra, gafas de sol y protección 50.
Puntuales, a las 9.30h salida de los 330 corredores, previamente a
las 7.30h lo hacían unos 150 senderistas.
Recorrido con salida en
bajada por senda algo estrecha y polvorienta, polvo que sumado al
protector solar hace que algunos más que corredores parezcamos
mineros. En el km 5 fin de la bajada, y a modo de preaviso del tramo
final, subida de 1.5km por cortafuegos con pendiente media del 25% …
(y éste es el fácil).
Tras repostar en el 1er.
avituallamiento (muy completo por cierto) te dejas llevar por pistas
rápidas de nuevo en bajada, con algún tramo más técnico entre
pinares, Vistas impresionantes a pesar de la calima que se cuece
abajo, y con un aroma a pino francamente agradable, acompañado
siempre por el sonido de las chicharras como música de fondo.
En el km 11 se desemboca
en una amplia pista con algún falso llano, pero siempre hacia abajo
hasta alcanzar en el km 18 los 1700m de cota, punto del 3er.
avituallamiento. Llegados aquí y del mismo modo que si fueses por el
pasillo de casa y girases 90º para subir por las escaleras al piso
de arriba, te das de bruces con el imponente tramo final, por más
que miras sólo ves cuesta, cuesta y más cuesta. En poco más de 3km
se ha de ascender de la cota 1700 a la 2160…y por un cortafuegos de
pendiente media del 30% y tramos del 37% en los dos primeros km, y
que luego se “suaviza” algo.
De las 5 ediciones que
lleva la prueba, tan sólo un corredor ha logrado completar corriendo
todo el tramo, era un atleta marroquí y en aquella primera edición
había premio en metálico, y doy fe de que se lo ganó bien ganado.
Llegados a este punto
toca caminar para el resto de los mortales, apretar los dientes,
mentalizarte que la meta está a sólo 3km, y confiar que las horas
de entrenamiento por los cortafuegos de los Montes de Málaga hayan
puesto a punto el motor diésel que llevamos los que ya tenemos
cierta edad.
Aupados por el público
presente, al que siempre deberíamos estar agradecidos los
corredores, y con 30ºC alcanzamos la meta, pero el calor es lo de
menos, si llegas entero habrás alcanzado “el cielo”, de lo
contrario pensarás haber caído en el mismísimo infierno.
2h22m, puesto 145 de la
general (de 330), puesto 9 de la categoría (de 26).
Buena organización, buen
ambiente, bebidas y frutas siempre frescas en todos los
avituallamientos a pesar de lo que caía. Para los que llevan el
gusanillo de la montaña dentro es una prueba que vale la pena correr
alguna vez.
Y lo más importante
barra libre de cerveza…!!!! con alcohol ¡¡¡¡ y bocata de jamón,
cortesía de los patrocinadores.
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